EL VALOR DE  LAS BUENAS PRÁCTICAS EMPRESARIALES

En todas las organizaciones es fundamental la implementacion de las buenas practicas, se convierten en una herramienta basica que beneficia la productividad y se ve reflejado en los resultados. Estas deben ir ligadas a los valores de la organizacion para que sea mayor el impacto.

Sin embargo es importante establecer un lineamiento, el cual sirva como guía para implementar las mejores practicas dentro de la organización; para que estas, complemeten a principios, objetivos y procedimientos en cada una de las áreas de acción. Estas acciones para que se categoricen como ¨Buenas Prácticas¨ deben de tener como características básicas el que siempre logran un resultado exitoso, sistematizan procesos y resultados; son sostenibles en el tiempo, manteniéndose y produciendo efectos duraderos; son innovadoras, disminuyen el riesgo, responden a necesidades específicas o situaciones criticas de la organización, dando perspectivas claras del problema y sobre todo tienen presente la evaluación, retroalimentación y reorganización de las acciones.

La implementación de las buenas prácticas empresariales, trae muchos beneficios a la organización como:

• La construcción de una cultura laboral sólida y favorable.

• La organización se vuelve más flexible y receptiva.

• Los equipos de trabajo crecen y se fortalecen.

• Se incrementa el reconocimiento profesional y se impulsa el liderazgo.

• Los procesos se eficientan y se priorizan.

• Se obtienen mejores resultados operacionales y económicos.

Lo importante es definir los objetivos y necesidades de la organización ante la creación de una práctica, enfocando claramente el propósito de esta. Por ejemplo, si la implementación será en la gestión humana debe buscarse un equilibrio entre la vida profesional y la personal de los colaboradores para optimizar su desempeño y mejorar su calidad de vida; considerar entre la oferta laboral un salario emocional que estabilice sus actividades e intereses, con programas que atiendan sus necesidades y garanticen su fidelidad a la organización.

Las buenas practicas favorecen la armonia en los sistemas de gestion, generan confianza y brindan seguridad de acción, permiten crear una cultura responsable y mejoran el clima organizacional; pero todo esto no sucede sin un equipo comprometido con la misiòn corporativa; y para que esto pase la alta direcciòn es la responsable de permear e involucrar a todos los colaboradores, brindando el ejemplo al momento de apicar las buenas practicas empresariales.

No todas las practicas  que ponemos en marcha pasan al nivel de buenas; por falta de maduracion o seguimiento, es muy importante no perder de vista el objetivo principal para no morir en el intento.