LA SEGURIDAD PRIVADA EN MÉXICO
La Seguridad Privada surge debido a que la sociedad busca
una solución al problema de la inseguridad, por lo mismo, los empresarios de
seguridad proponen brindar a través de sus servicios profesionales una buena
opción para coadyuvar con las funciones de la seguridad pública y reducir el
riesgo de la población a ser parte de la estadística criminal.
En estos tiempos de inseguridad en México, necesitamos a
todas las corporaciones policiacas públicas del país y porque no, también a la
privada, ya que puede ser contratada por la seguridad pública en ciertos casos
como apoyo a las diversas tareas operativas.
La demanda de servicios de seguridad privada en México sigue
incrementándose en los fraccionamientos, áreas públicas, supermercados, centros
comerciales, tiendas de conveniencia, entre otras; por lo tanto, existe un
aumento en la contratación de guardias de seguridad, sistemas de cámaras de
circuito cerrado de televisión, sistemas de alarma, control de accesos,
etcétera.
Hay que tener en cuenta que las empresas de seguridad
privada tienen que cumplir con las disposiciones legales para poder prestar sus
servicios, por ello para entender algunos aspectos importantes en esta materia,
haré mención de lo que establece la Ley Federal de Seguridad Privada, por
ejemplo, el artículo 2 dice que se entenderá por Seguridad Privada:
“…Actividad a cargo de los particulares, autorizada por el
órgano competente, con el objeto de desempeñar acciones relacionadas con la
seguridad en materia de protección, vigilancia, custodia de personas,
información, bienes inmuebles, muebles o valores, incluidos su traslado;
instalación, operación de sistemas y equipos de seguridad; aportar datos para la
investigación de delitos y apoyar en caso de siniestros o desastres, en su
carácter de auxiliares a la función de Seguridad Pública”.
Es importante mencionar que los servicios de seguridad
privada pueden darse en diversas modalidades, al respecto el artículo 15 de la
misma Ley dice que:
“…Es competencia de la Secretaría, por conducto de la
Dirección General, autorizar los servicios de Seguridad Privada, cuando éstos
se presten en dos o más entidades federativas y de acuerdo a las modalidades
siguientes:
I. SEGURIDAD PRIVADA A PERSONAS. Consiste en la protección,
custodia, salvaguarda, defensa de la vida y de la integridad corporal del
prestatario;
II. SEGURIDAD PRIVADA EN LOS BIENES. Se refiere al cuidado y
protección de bienes muebles e inmuebles;
III. SEGURIDAD PRIVADA EN EL TRASLADO DE BIENES O VALORES.
Consiste en la prestación de servicios de custodia, vigilancia, cuidado y
protección de bienes muebles o valores, incluyendo su traslado;
IV. Servicios de alarmas y de monitoreo electrónico. La
instalación de sistemas de alarma en vehículos, casas, oficinas, empresas y en
todo tipo de lugares que se quiera proteger y vigilar, a partir del aviso de
los prestatarios, así como recibir y administrar las señales enviadas a la
central de monitoreo por los sistemas, y dar aviso de las mismas, tanto a las
autoridades correspondientes como a los usuarios de los sistemas y equipos, así
como a los prestatarios, en forma inmediata;
V. Seguridad de la información. Consiste en la preservación,
integridad y disponibilidad de la información del prestatario, a través de
sistemas de administración de seguridad, de bases de datos, redes locales,
corporativas y globales, sistemas de cómputo, transacciones electrónicas, así
como respaldo y recuperación de dicha información, sea ésta documental,
electrónica o multimedia;
VI. Sistemas de prevención y responsabilidades. Se refieren
a la prestación de servicios para obtener informes de antecedentes, solvencia,
localización o actividades de personas, y
VII. Actividad vinculada con servicios de seguridad privada.
Se refiere a la actividad relacionada directa o indirectamente con la
instalación o comercialización de sistemas de blindaje en todo tipo de
vehículos automotores, y de los equipos, dispositivos, aparatos, sistemas o
procedimientos técnicos especializados”.
El artículo 16 hace referencia que, para prestar servicios
de seguridad privada en dos o más entidades federativas, se requiere
autorización previa y cumplir con los requisitos establecidos en el título
tercero de la Ley. Así mismo, el artículo 18 dice que para el desempeño de las
funciones del personal operativo, debe carecer de antecedentes penales, ser
mayor de edad y estar inscritos en el Registro Nacional del Personal de
Seguridad Pública, entre otros.
Es importante que las empresas que prestan los servicios de
seguridad privada en cualquiera de las modalidades antes mencionadas, cuenten
con personal capacitado y certificado mediante una adecuada profesionalización
en todos los temas relacionados con la seguridad, por ejemplo: marco legal,
acciones de apoyo al primer respondiente, cadena de custodia y preservación del
lugar de los hechos o del hallazgo, los diferentes sistemas de seguridad,
control de accesos, uso de radios y claves, instrumentos no letales, plan ante
situaciones de emergencia, protección civil, procedimientos de evacuación,
seguridad e higiene, en la investigación, en el desarrollo y uso de nuevas
tecnologías, en el ámbito de la criminalística, relaciones públicas y humanas,
derechos humanos, entre otras.
Desafortunadamente, en la industria como tal, hay dos tipos:
una informal que no se ha podido combatir y otra que es la del sector formal
que trabajan para tener un crecimiento de forma correcta y profesional. Las
empresas que laboran fuera del margen de la ley están siendo contratadas por
particulares, condominios y por algunas empresas pequeñas que buscan abatir
costos y encuentra un nicho en aquellas que ofertan precios bajos y servicios
de mala calidad, pero con un alto con riesgo.
La seguridad privada en los próximos años puede lograr
avances importantes, sin embargo, el Gobierno es el que tiene que hacer el
trabajo preventivo de la seguridad para que el pueblo esté completamente
seguro, ya que el papel natural de la seguridad privada es una opción para elevar
los niveles de seguridad preventiva no reactiva, por lo mismo, se debe trabajar
en el diseño de sistemas preventivos de seguridad pública.
El Sector público
El presidente Andrés Manuel López Obrador analiza la
creación de una Policía Federal para que el sector público asuma la vigilancia,
esto tras reconocer que a más de un año de su administración las dependencias
federales aún tienen contratos con empresas de seguridad privada.
Durante conferencia aseguró que en breve comenzarán con la
cancelación de los contratos que alcanzaron una nómina paralela de hasta 50 mil
elementos de seguridad privada.
“Comentamos por la mañana lo del tener ya, un órgano para
dar seguridad a las oficinas federales, una Policía Federal, solo para dar
servicio de vigilancia a oficinas del gobierno porque se tenían contratos de 50
mil elementos de policías particulares, privadas”, adelantó.
Afirmó que las contrataciones se realizaban desde la
Secretaría de Gobernación, cuando esta administraba la extinta Policía Federal
y la Secretaría de Seguridad Pública. Recordó que esta medida forma parte de
las políticas de austeridad republicana y que con ellas, han alcanzado un
ahorro de hasta 200 mil millones de pesos.
“Se llegó al extremo, al colmo de que la Secretaría de
Gobernación que manejaba la Secretaría de Seguridad, manejaba servicios
privados a policías, para vigilar sus oficinas. Entonces, eso ya no se permite.
Hay contratos vigentes y poco a poco se van a ir cancelando, es poner orden en
la administración”, comentó.
El Sector privado
Preguntamos a Marcos
Castillo Amendola, Director General en PROSEGUR México sobre el sector y esto fue lo que nos dijo.
Según la AMESP de la cual somos socios fundadores, hay
aproximadamente 3,400 empresas de seguridad privada registradas en México y
calculamos aproximadamente de 7,000 a
8,000 mil empresas en total.
Calculando que el tamaño del mercado es de unos 500 mil
vigilantes, estimamos que solo un 5% de las empresas registradas tienen
contratados a más de 1,000 empleados, algunas de ellas que tenemos
identificadas son: GSI, Serpaprosa, Multisistemas, Inter-Con, Serviseg, Grupo
Consultores, Securitas, G4S, Paprisa, IPS, ILSP y Prosegur.
Los principales estados en donde se concentran las empresas
de seguridad privada son los de mayor concentración empresarial, industrial y
el PIB: Ciudad de México, Estado de
México, Zona Bajío y Occidente (Guadalajara, Querétaro, Guanajuato,
Aguascalientes), Zona Norte: Nuevo León, Tamaulipas y Zona Fronteriza.
Los principales sectores económicos a los que la seguridad
privada brindan sus servicios en nuestra opinión son: Industrial, Retail, Manufactura, Corporativo y Logístico.
La principal problemática de las empresas de seguridad
privada son los salarios deficientes, falta de mano de obra calificada, la
tarea del vigilante como algo no digno, la competencia desleal y la falta de
una Cámara de la industria que nos represente ante las autoridades.
Para mejorar la industria se requiere de una mejora salarial
de la mano de obra de los vigilantes, la profesionalización de la actividad de
la seguridad privada y una mejor regulación, comentó para Xtrem Secure, Marcos
Castillo, director General de PROSEGUR.
Conclusión
Sin duda la seguridad privada es un sector estratégico en la
economía de México ya que representa aproximadamente el 1.5% del PIB del país,
por ello el gobierno debe estandarizar las regulaciones y trámites para que las
empresas puedan regularizarse y evitar estar en la informalidad, actualmente
las empresas tienen que rendir doble o triple tributación además de pagar por
cada elemento registrado.
De igual manera otro de los problemas a los que se enfrentan
las empresas de seguridad privada son los apoyos fiscales, sumado a esto está
el tema de los derechos humanos en las empresas, el cual debe ser bilateral ya
que es complicado como empresa apoyar al personal cuando no se cuenta con el
apoyo del gobierno y además golpea con excesivos pagos de impuestos.
Las empresas dan trabajo a la gente, si suben el salario de
los empleados en automático el impuesto es más grande, “entre más se paga es al
revés porque más es el impuesto”, comenta un empresario de seguridad quien
resaltó que si otorga premio de puntualidad, bono de asistencia, bono de
productividad y ayuda para transporte en apoyo a sus empleados, el Seguro
Social lo quiere adjuntar al rubro salarial aumentando los impuestos, ISR y
cuotas, “SE PAGA IVA POR FOMENTAR Y APOYAR EL EMPLEO, ES ABSURDO” comentó.
Por ello empresas de
seguridad se organizaron en una agrupación para profesionalizar el sector, ya
que muchas de ellas operan en la informalidad, el nombre de esta organización
es Agrupaciones de Seguridad Unidas por un México Estable (ASUME), el cual
coordina Armando Zúñiga Salinas, esperemos ver resultados pronto.
Con información del Dr. Andric Núñez Trejo, Lic. Marcos
Castillo y Xtrem Secure
No hay comentarios:
Publicar un comentario